Óscar Rodríguez
Las fuerzas estatales de seguridad lograron la captura del vicario de la Arquidiócesis de Oaxaca Carlos Flores, luego de que un juez le dictara una orden de aprehensión por el delito de abusos sexual agravado
El también sacerdote fue internado en el penal de mediana seguridad de Miahuatlán y el juez le negó el beneficio de la libertad caucional al ser considerado un preso peligroso para la sociedad.
De acuerdo al expediente penal 274/2016, en poder del Juez Cuarto de lo Penal, un joven que laboro con el clérigo fue quien presento la denuncia y las pruebas del presunto abuso sexual.
Precisa que los hechos tuvieron momento cuando el sacerdote abusó sexualmente de su víctima luego de una reunión donde se departieron bebidas alcohólicas.
El segundo caso de abuso sexual en la arquidiócesis de Oaxaca, después de la consignación del párroco Gerardo Silvestre Hernández, encarcelado desde noviembre de 2013.
Ante el notorio caso el sacerdote Alejandro Solalinde demandó la renuncia del arzobispo José Luis Chávez Botello, por encubrir actos de pederastia.
En respuesta el arzobispo José Luis Chávez, exigió justicia en el caso del vicario detenido, y aseguró que no privilegia la impunidad.
“Solo le pide a la Fiscalía General de Justicia que haya justicia, nosotros no defendemos a nadie y en caso de comprobarse la acusación pedimos que se aplique la ley con todo rigor.
Rechazo también que la arquidiócesis vaya a cubrir los gastos por la defensa legal del implicado, quien tendrá que cubrirlos de su propia bolsa.
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