OCTAVIO VÉLEZ ASCENCIO
El pueblo indígena ikoot de San Dionisio del Mar, región del Istmo de Tehuantepec, desconoció y revocó el domingo pasado en asamblea general el contrato de arrendamiento de más de mil hectáreas de sus tierras, suscrito por la autoridad municipal con la compañía española Preneal, para el establecimiento de la central eólica “Barra Santa Teresa”.
Además, determinó ocupar el Palacio Municipal para demandar la destitución del presidente Miguel López Castellanos, por defender los intereses de la empresa ibérica.
Bettina Cruz Velásquez, integrante de la Asamblea de los Pueblos Indígenas del Istmo en Defensa de la Tierra y el Territorio, informó que la asamblea general invalidó el contrato por la renta de mil 643 hectáreas, firmado el 8 de noviembre del 2004 para un periodo de 30 años, porque se violó su derecho como pueblo indígena a la información oportuna, amplia, suficiente y adecuada.
Además, subrayó que la omisión de información de la empresa eólica “representa un intento doloso y de la mala fe por obtener un alto beneficio económico” aprovechando el desconocimiento del pueblo indígena ikoot de las leyes nacionales e internacionales.
Expuso que la asamblea general desconoció y revocó el contrato de arrendamiento con Prenal por no cumplir los términos y estándares nacionales e internacionales de derechos de los pueblos indígenas, y los demás contratos o convenios con otras empresas nacionales y trasnacionales con posteridad, por afectar la propiedad, posesión y disfrute de su territorio, en especial aquellos destinados a la implementación del parque eólico.
Además, destacó que la asamblea general autorizó al Comisariado de Bienes Comunales para defender el territorio ikoot, cancelar y anular de manera total y absoluta cualquier tipo de convenio o contrato firmado, por la violación al derecho a la consulta previa, libre e informada.
Cruz Velásquez dijo que el pueblo indígena ikoot también se apoderó del Palacio Municipal para demandar al Congreso del Estado la destitución del munícipe López Castellanos, por estar coludido con la empresa al tratar de imponer el proyecto eólico en su territorio por encima del poder popular.
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Apenas el 22 de enero pasado, la asamblea general del pueblo indígena ikoot se rehusó a otorgar el permiso del cambio de uso del suelo a la Prenal, para el establecimiento de la central eólica “Barra Santa Teresa”.
El coordinador de Programas de la Unión Comunidades de la Zona Norte del Istmo (Ucizoni), Carlos Beas Torres dijo que la central eólica pondría en peligro la vida del pueblo indígena ikoot y causaría daños a la biodiversidad del lugar por la existencia de manglar, selva, lagunas, peces y aves.
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