Crónicas de la ínsula
Cuauhtémoc Blas
Las denuncias y críticas al Centro Oaxaca de la Secretaría de Comunicaciones (SCT) no cejan, sin embargo el titular de ésta José Luis Chida Pardo prosigue en su puesto como si hiciera un buen trabajo. No hay justicia en ello, ¿cómo seguir con alguien que no hace bien su trabajo? Hay testimonios de sobra.
Uno de los más evidentes y desastrosos trabajos de construcción de carreteras que no sólo no culmina a dos y medio años, con las molestias y accidentes que conlleva, sino se ha constituido en obstrucción para la afluencia de turistas a la zona que afecta a las empresas, hoteles y restaurantes de Puerto Escondido, a meseros, empleadas y trabajadores. Se trata del tramo de la carretera de Pochutla a ese destino turístico, que inicia desde Salina Cruz y culminará en Pinotepa Nacional; tramo que lleva un retraso de dos años y medio, desde cuando el impune ex gobernador Ulises Ruiz Ortiz dio el banderazo de arranque.
Llama poderosamente la atención lo que ahora sucede y consignapanoramadelpacifico.com/?p=14999#more-14999 : “Luego de retrasar la construcción de una carretera en Oaxaca durante 2 y medio años, Omega cederá los derechos de la concesión a ICA, operación que nunca antes había ocurrido en el país”. En la nota se lee que por la crisis (¿Cuál de todas?), Omega no logró obtener los recursos para construir la obra y ni siquiera los recursos del Fondo Nacional de Infraestructura logró que la construcción se realizara, y para no retrasar más la obra se cedió a ICA.
Si esa empresa no tenía los recursos para construir la obra, ¿cómo es qué ganó la licitación? Se sabe bien que dos requisitos inevitables es que las empresas presenten capacidad financiera y moral para realizar las obras. Y esta que ganó (¿) la licitación no tuvo dinero ni para la mitad, pues sólo algunos tramos ha construido. Sin embargo, el anuncio fue que ICA tomaría la obra en enero de este año, y no se ve que los trabajos reinicien. Quizá lo otros problemas que Chida Pardo ha propiciado en la región hizo que esa exitosa empresa mexicana de alcance internacional que es ICA haya desistido hasta ahora de comprar problemas.
La carretera federal 200 que va de Pochutla a Puerto Escondido no sólo presenta la irregularidad anterior, también hay quejas de los dueños de los terrenos afectados por la construcción de la segunda vía aún no indemnizados. Ellos denuncian, sin que se les atienda, la colusión de José Luis Chida Pardo en el manejo de 10 millones 200 mil pesos destinados a esas indemnizaciones pero injustificadamente entregado a un personaje de nombre Claudio Pacheco Altamirano. Supuesto representante de los afectados que nadie habilitó como tal y se quedó con el dinero, aclaran ellos.
Comuneros de Cozoaltepec denuncian que inicialmente se cotizaron sus terrenos a 20 pesos metro cuadrado, pero ahora la SCT quiere pagar a los comuneros 8 pesos con 50 centavos, menos de la mitad del precio acordado, y esto porque SCT Oaxaca entregó extrañamente esos millones de pesos que al citado personaje y no a los comuneros. Los afectados se preguntan “¿Por qué José Luis Chida Pardo y José Bustamante Delgado pagaron a la persona equivocada?, ¿o es que a ellos también les tocó su parte?” Bustamante Delgado es residente general de carreteras federales. Un recibo sin folio firmado por éste y Pacheco certifica ese pago (recibo que obra en nuestro poder).
Lo anterior fue denunciado desde septiembre del año pasado en asamblea general respaldada por hombres y mujeres posesionarios de las comunidades de Macahuite, Barra del Potrero, Villas San Luis, Santa Elena, Guapinole, Agua Blanca del Pacífico, Tilzapote, Escobilla y la Culebra, pertenecientes a San Francisco Cozoaltepec, en la asamblea realizada en las instalaciones de la representación municipal Barra del Potrero, Cozoaltepec
En esa asamblea las más de 300 familias perjudicadas de San Francisco Cozoaltepec acordaron tomar las medidas necesarias para defender las tierras ante el proyecto de SCT, recibieron también el apoyo de pobladores y del agente municipal Lorenzo Antonio Ramírez Hernández. “Si vamos a la cárcel nos vamos todos, somos gente pacífica pero responderemos con fuerza si tratan de abusar y pisotear nuestros derechos” sentenciaron.
Son muchos los pendientes de SCT Oaxaca; en Salina Cruz más de dos años para terminar una nueva vía de acceso a ese puerto, que debió concluir el año pasado y aún no la culminan. Después de cuatro años concluyeron un solo túnel que presumen. Algo debe estar mal que al menos en un par de ocasiones el presidente Felipe Calderón ha cancelado su inauguración. SCT Oaxaca, además, dejó tirado el tramo de Camarón-Totolapan que lleva del Istmo a Oaxaca de Juárez. Desde la temporada de lluvias pasada los baches y grandes hoyos apenas recientemente están siendo cubiertos con lentitud.
También en el Istmo, en la zona norte de esa región SCT tienes pendientes y ha propiciado movilizaciones de la población de San Juan Guichicovi. La negligencia de SCT afecta demasiado, hasta desvía la fuerza productiva de los pueblos para afrontar sus ineficiencias con acusaciones de corrupción. En otra extraña licitación para la rehabilitación de la carretera al casco del municipio mencionado desde el entronque en la carretera transístmica, ganó una compañía de una persona física que abiertamente declaró no tener dinero ni para empezar la obra.
La empresa de don Mariano González debió concluir y entregar estos trabajos el 6 de diciembre pasado, pero sólo llegó a horadar unos cuadros en el pavimento que dejó como bien delineados hoyancos por donde tiene que transitar la gente con sus vehículos. Ahí están los simétricos nuevos baches, van para tres meses de retraso y no se ve cuando terminarán con este trabajo tan simple.
Además, el presidente municipal de Guichicovi, Heberto Luis Zacarías, declaró que recursos del FONDEN de 2010 aún no los ejerce SCT, por lo que están pendientes desde ese año reparaciones en numerosos caminos de pueblos o agencias de ese municipio: de San Juan a Zacatal; de Rio Pachiñé a Guasamando; de Robalo a San Juanito; 32 km de la carretera transístmica a Progreso, etcétera. ¿Donde habrán estado los 18 millones de pesos de ese programa para este municipio todo este tiempo?
En épocas pasadas el gobierno federal tomaba en consideración la opinión de los gobiernos estatales en el nombramiento o ratificación de sus funcionarios. Parece que ahora el nuevo presidencialismo sin demasiada injerencia en los gobiernos locales también sirve, y sobre todo, para que algunos de esos funcionarios ostenten abierta e intocable impunidad. Y éste, del que nos ocupamos, ya está dañando mucho a Oaxaca.
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