Martín Vargas
Matías Romero.- Durante el recorrido de Samuel Gurrión en Matías Romero, los colonos expresaron que el triunfo del candidato “del pueblo” a la diputación federal es eminente, porque más allá de las encuestas que le dan la victoria, una gigantesca estructura de carne y hueso, con nombre y apellido, le brinda su respaldo, además de las personas que sin importar el partido político ha declarado abiertamente votar por el único candidato que garantiza beneficios para el Séptimo Distrito. 
A decir de los pobladores, el compromiso de Samuel Gurrión Matías con la ciudadanía lo ha llevado hasta la última casa de cada barrio, así como de agencias y comunidades que pocos o ningún candidato han visitado, ese esfuerzo le ha valido la confianza de mujeres y hombres más allá de los partido políticos, que ven en el abanderado del tricolor el firme compromiso de servir a quienes más lo necesitan. En ese contexto, expresaron que Samuel Gurrión, sigue sumando fuerza en Matías Romero, en esta ocasión reunido con la militancia del tricolor en la colonia Cuauhtémoc, donde fue recibido por jóvenes, mujeres, ganaderos y colonos en general, acompañados por líderes del PRI en la región como Severiano Pacheco Vicente, Alfredo Juárez Díaz y Janet Pérez Maldonado, secretaria del comité seccional del Partido Revolucionario Institucional, quienes cerraron filas junto con la militancia del municipio ferrocarrilero para respaldar con su voto a Samuel Gurrión Matías. Durante su intervención el candidato a la diputación por el Séptimo Distrito Electoral, Samuel Gurrión Matías se comprometió a impulsar leyes y gestiones en beneficio de la salud, educación, al campo e infraestructura en colonias, bajar recursos federales y estatales, así como a formar mesas de trabajo para diseñar proyectos productivos para mujeres, campesinos y ganaderos con la finalidad que la economía abunde en cada hogar y cada municipio. 
Samuel Gurrión enfatizó que su campaña además de presentar proyectos concretos es también una campaña para recuperar la credibilidad y la confianza entre representantes y representados, sin demagogia ni mentiras, con la seguridad que su trabajo en el Congreso Federal será acompañado por los hombres y mujeres del istmo.
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