El Secretario General de Gobierno, Jesús Martínez Álvarez, anunció la implementación del programa de Canje de Armas por despensas o especies, mostrándose a favor del desarme voluntario en las comunidades.
«Normalmente cuando hay armas siempre hay drogas aunque los pueblos para resolver sus conflictos internos usan las armas, el problema es que son armas prohibidas por el Ejército Mexicano y eso nos preocupa mucho», declaró.
El encargado de la política interna reconoció que en la zona Mixe y en las regiones de la Sierras Norte y Sur y la Mixteca, han sido detectados plantíos de enervantes, marihuana y amapola, principalmente y personas con posesión de armas de fuego.
Sin precisar el número de comunidades en donde se estima que hay siembra de mariguana, manifestó que éste ilícito se da en donde existe mayor aislamiento en infraestructura para poder acceder.
«Es difícil determinar en cuántas comunidades existe esa siembra de marihuana, porque esos datos los tiene el Ejército Mexicano, institución que realiza las inspecciones y detectan plantíos» explicó.
Para Martínez Álvarez, muchos de los conflictos agrarios que existen en la entidad se han convertido en pretexto de diversas comunidades para enmascarar el tráfico de drogas, de armas e incluso de indocumentados.
“En muchas ocasiones, los conflictos agrarios, sirven de parapeto no para una comunidad, para dos o tres que manipulan las cosas y no quieren que se arreglen para proteger otros intereses” reconoció.
De igual forma argumentó que en varias comunidades del Estado continúa la presencia de elementos del Ejército Mexicano, como es en el caso de San Lucas Camotlán, la cual es calificada con un alto grado de riesgo por los actos acontecidos recientemente.
«Primero porque hay mucho conflictos agrarios, segundo se ha convertido cercano a la zona en un lugar de tráfico de indocumentados, tercero hay armas y la otra siembra de mariguana fundamentalmente», señaló.
Con dos estrategias se actuará en esa población, indicó, siendo una de ellas la presencia del Ejército Mexicano, de la Policía preventiva, la Procuraduría y una oficina especial.
La segunda estrategia que se está planteando es el desarme, llevando a cabo el programa de Canje de armas de fuego por despensas y/o dinero.
Para finalizar, Martínez Álvarez indicó que como Secretaría General de Gobierno desconocía la cantidad de hectáreas de marihuana destruidas y detectadas por el Ejército Mexicano, no obstante, aseguró que en cada acción son notificados por los mandos militares correspondientes.
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