Muchos hablan, opinan desde lo que conocen y viven como ciudadanos que se sienten afectados en su cotidianidad con el paro de labores educativas y las manifestaciones magisteriales, basando sus opiniones en información brindada en medios del Estado y la clase empresarial, desconociendo en esencia la realidad de la educación en el país y en este caso los contenidos de la mal llamada reforma educativa.
La Presidencia de la República ha denominado a la “REFORMA EDUCATIVA: Construyendo la gran obra colectiva que es México” vaya título sin sentido. ¿Cuál colectividad? La reforma fue impuesta por el Ejecutivo, obedeciendo intereses empresariales, más aún cuando sostiene qué “la Reforma Educativa está pensada y diseñada para darles a nuestros niños, las herramientas y conocimientos necesarios para competir y triunfar. Y que el propósito fundamental de esta Reforma: es elevar la calidad de la educación que reciben nuestros niños y jóvenes” que maneras de contradecirse entre los poderes, mientras uno sostiene que el fin de la reforma es la calidad educativa, otros afirman que es solo una reforma político administrativa, por ello resulta grave el manipuleo de las palabras para articular un discurso que es solo mediático en favor de la Educación de nuestro país. El fondo es otro según lo manifestado en la tribuna por los Senadores Panistas Romero Hicks y Corral Jurado, entre otros, afirmaron en el posicionamiento que hicieron sobre la llamada reforma educativa, que la reforma que se discutía no tocaba temáticas propiamente educativas, y señalaron que se trata de una reforma Político–administrativa, y que en ella solo se aprobaban las bases para poder realizar en una posterior reforma la revisión del modelo educativo, los planes y programas de estudio, libros de texto, programas y materiales educativos, currícula, y contenidos pedagógicos.
Por lo tanto las leyes secundarias en materia educativa aprobadas, no reflejaran de ninguna manera una mejoría para la calidad educativa, y sin embargo lo que si hace esa reforma es dejar inermes y atados a los maestros a reglas de control contrarias a sus derechos laborales, creando un régimen jurídico especial, como si fueran trabajadores eventuales, sin base, transgrediendo la estabilidad en el empleo, y sujetos a evaluaciones diseñadas por “especialistas” para despedirlos masivamente.
Dejar de tomar en cuenta la opinión de los sectores involucrados en la Educación, como padres de familia, especialistas en temas educativos, pero sobre todo a los maestros, como lo marca el artículo Tercero Constitucional, es la causa de que las leyes secundarias no pueden ser asumidas por el sector magisterial, pues le son ajenas, desconocidas, distantes. El desdén de las autoridades, al ignorar las propuestas construidas sobre todo a través de la lucha de la CNTE, por más de tres décadas y en años recientes desde la firma de la Alianza por la Calidad de la Educación (ACE), la Sección XXII en los últimos cinco años construyó una propuesta alternativa, realizada colectivamente que recupera los saberes, las experiencias, los éxitos y los fracasos de quienes han pasado su vida en las aulas y que han padecido todas las adversidades e inclemencias del contexto en el que cotidianamente realizan su trabajo, este Proyecto Pedagógico recuperó y sistematizó las experiencias educativas, didácticas, que determinan nuestras concepciones sobre el proyecto educativo, a través de Asambleas en Centros de Trabajo, Asambleas comunitarias y/o urbanas, los Foros Sectoriales de Educación, diversos Congresos Educativos, dieron como resultado el Plan para la Transformación de la Educación en Oaxaca (PTEO), documentos revisados por el Departamento de Investigaciones Educativas (DIE) del Centro de Investigaciones Avanzadas del Instituto Politécnico Nacional (CINVESTAV), que está siendo ignorada, así como los Foros realizados en los últimos meses por la CNTE en diversos Estados de la República en donde se recuperaron propuestas, se expusieron problemáticas educativas a las que no se les está dando respuesta, indispensable y necesario recuperar estos procesos, para entender las causas de las protestas, las afectaciones de las leyes secundarias no solo a los derechos de los trabajadores, sino al principio de gratuidad de la educación, como se aprecia de la simple lectura de los artículos 6°, 12 fracción V Bis y 28 Bis de la Ley General de Educación reformada, en donde se legalizan las cuotas voluntarias y el Estado delega su obligación de garantizar el derecho a la educación, a través de la figura de Gestión Educativa que establece la Reforma, al dejar bajo el liderazgo de los directores de las escuelas, la resolución de los retos que enfrenta cada institución, señalando como objetivos: mejorar la infraestructura; comprar materiales educativos; resolver problemas de operación básicos y propiciar condiciones de participación entre los alumnos, maestros y padres de familia, quitándole a la educación el carácter gratuito, que establece la Constitución Federal en su artículo 3°.
La mal llamada reforma educativa tiene un carácter regresivo, violenta derechos y atenta contra la estabilidad social y económica, contraviniendo el principio de progresividad de los derechos sociales, son causas y no sin razón o intereses mezquinos los que hoy mueven a los maestros, se trata de defender a los que menos tienen, de dar una lucha más para contribuir a la transformación social de este país, históricamente han sido los maestros y maestras quienes defiende esas causas, no los empresarios o los grupos políticos que solo velan por sus intereses.
En días pasados la CNTE fue capaz de mostrar su músculo, manifestándose contundentemente y con esa demostración de fuerza lograron ser escuchados. Las autoridades deben entender el mensaje y esfuerzos de la CNTE, al hacer sus mejores oficios para tender puentes que aperturen diálogos serios en donde se tomen acuerdos claros que tiendan a evitar un conflicto que puede escalar a grandes dimensiones en todo el país, es momento de hacer un llamado a las autoridades federales para que dejen de ser sordos y escuchen los reclamos de quienes si conocen, viven, trabajan y construyen día a día el tema educativo, a las autoridades locales a intervenir adecuadamente en la construcción de soluciones y nuevas reglas que vayan en beneficio de los niños, niñas y jóvenes de sus entidades, ¿No creen señores gobernantes, legisladores, que el tema educativo, siendo el motor del desarrollo de este país, merece su atención urgente y su intervención inmediata?. A la sociedad civil, a los ciudadanos, llamarles a realizar un esfuerzo para conocer por medios diversos a los masivos, sobre la coyuntura política nacional, y actuar sobre los temas que son de interés común como lo debería ser la educación pública.
Profesor Azael Santiago Chepi.
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