La revista Forbes publicó hoy el Top 10 de los mexicanos más corruptos de 2013, posicionando a la exlideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Eduación (SNTE) Elba Esther Gordillo en el primer lugar.
De acuerdo con la publicación, Gordillo es conocida por su lujosa vida. En el perfil que realiza Forbes de «La Maestra» destaca el número de residencias que posee, la compra de costosas bolsas Hermes, así como las cirugías que se realizó en prestigiosas clínicas de California.
En segundo lugar se encuentra el actual líder sindical de los trabajadores de Pemex, Carlos Romero Deschamps, quien, apunta la publicación, es «siempre sospechoso de tráfico de influencias para el enriquecimiento personal».
Dentro de la ficha, la publicación resalta la ostentosa vida de sus hijos, así como los regalos de millones de dólares que Romero Deschamps les ha dado.
En la tercera posición aparece Raúl Salinas de Gortari, quien, de acuerdo con Forbes, es un «símbolo de la corrupción y la impunidad».
El escrito resalta su caso ante la justicia mexicana, que lo absolvió en 2005 y ordenó que se le regresaran 19 millones de dólares y 41 propiedades.
Genaro García Luna se colocó en la cuarta posición por ser el funcionario que recibió mayor presupuesto para la secretaría de la que estuvo a cargo -de Seguridad Pública- durante el sexenio de Calderón, además de un cheque en blanco que le fue otorgado por el exmandatario mexicano.
La revista retoma además las declaraciones realizadas por el narcotraficante Édgar Valdez Villarreal «La Barbie», quien indicó que García Luna había estado en la nómina de grupos del crimen organizado por cerca de una década.
En la quinta posición está el exgobernador del estado de Tabasco, Andrés Granier, quien en una conversación grabada alardea de sus 400 pares de zapatos, 300 trajes y mil camisas, además de que presuntamente hizo uso de recursos estatales para su bien común.
Tomas Yarrington, exgobernador priista de Tamaulipas, fue colocado en la sexta casilla por los presuntos sobornos de grupos del narcotráfico de los que fue beneficiario.
En el lugar siete está el exgobernador del estado de Coahuila, Humberto Moreira, quien es responsable de que la deuda de la entidad pasara de 200 millones de dólares a 35 mil millones.
Forbes resalta de igual forma la lujosa vida que lleva junto con su familia en Barcelona.
A Moreira le sigue Fidel Herrera, exgobernador priista de Veracruz, quien durante su administración las actividades delictivas de los Zetas prosperaron gracias a los presuntos sobornos que le fueron otorgados por dicho grupo delictivo.
La penúltima posición es para el también priista y exgobernador del Estado de México, Arturo Montiel, quien gabría manipulado a la justicia para impedir que su exesposa, Maude Versini, tuviera la posibilidad de ver a sus hijos.
Forbes apunta que Montiel se retiró de la política tras las sospechas deque adquirió mansiones millonarias en México y Francia.
Y en el último lugar está Alejandra Sota, portavoz del expresidente Felipe Calderón, quien es investigada por su presunta malversación de fondos y tráfico de influencias.
Señalan que es sospechosa de favorecer a amigos en los contratos del gobierno durante el tiempo que se desempeñó en su cargo.
Forbes explicó que el listado surgió a partir de que México se ganara el título del país de Latinoamérica más corrupto, de acuerdo con el grupo de anticorrupción global International Transparency.
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