Sin complejos ante Brasil

• Con grandes atajadas, Ochoa fue el mejor jugador del partido
• El cuadro del Piojo inquietó el arco rival con tiros de larga distancia
• Los dos equipos, invictos, llegan a cuatro unidades en el sector A
• Primer punto del Tricolor en mundiales frente a la verdeamarela

Agencias

Periódico La Jornada
Miércoles 18 de junio de 2014, p. a10
Fortaleza, 17 de junio.

Guillermo Ochoa tuvo un trabajo sobresaliente y se alzó como un gigante con varias atajadas espectaculares, para rescatar el empate 0-0 ante Brasil. Así, México –que esta tarde desplegó un esquema táctico correcto–, junto con el anfitrión, mantiene viva la esperanza de avanzar a la siguiente fase.

Ochoa tuvo varias intervenciones de antología y conservó invicto el arco tricolor, por lo cual fue nombrado por FIFA como mejor jugador del partido. En un momento sublime atajó a una mano un cabezazo de Neymar que se metía junto a su poste derecho, a los 25 minutos; de nuevo fue empleada la alta tecnología: el Ojo de halcón evidenció que el balón no entró gracias a la desviada de Memo.

Poco antes del descanso, el guardameta paró un tiro a quemarropa de David Luiz, luego de que Thiago Silva bajó el balón con el pecho para dejarlo frente al portero.

Ochoa coronó su actuación en la segunda mitad, cuando ahogó el grito de gol de la desesperada y nerviosa tribuna a los 68 minutos, con otra enorme atajada con el pecho para contener un zurdazo de Neymar, y a pocos minutos del final sacó la mano derecha, de puro reflejo, para tapar un potente cabezazo a quemarropa de Thiago Silva.

Brasil y México lideran el sector A con cuatro puntos, aunque los anfitriones están arriba por mejor diferencia de goles. Croacia y Camerún, sin unidades, se enfrentan el miércoles.

El partido comenzó con reiterados choques y balones divididos. De a poco, Brasil empezó a dominar más el balón, abriendo constantemente a las bandas con sus laterales Marcelo y Dani Alves, pero sin generar mucho peligro. México esperaba más replegado, pero no renunció a atacar, y llevó algún peligro con remates lejanos.

Al son de Cielito Lindo en las tribunas –la asistencia de mexicanos fue masiva–, el equipo de Miguel Piojo Herrera ahogó a Brasil en todos los sectores de la cancha e impidió durante la mayor parte de los 90 minutos la subida de sus laterales, dejando al combinado local sin generación de juego ofensivo y dependiendo del genio individual de Neymar, bien controlado por Paul Aguilar.

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El capitán mexicano Rafael Márquez (4) y el también defensa David Luiz, en una imagen que ejemplifica la intensidad con que se disputó el encuentro en el estadio CastelaoFoto Ap
A los 23 minutos, el mexicano Héctor Herrera sacó un potente remate que Julio César desvió en espectacular vuelo, y tras el cabezazo de Neymar, Miguel Layún intentó otro disparo lejano que resultó ligeramente desviado.

En un partido intenso, de mucho contacto, la verdeamarela extrañó la corpulencia y potencia de Hulk, quien se perdió el juego por una molestia muscular en la pierna izquierda. Brasil empezó el partido con Ramires, un volante, en lugar del ariete del Zenit de San Petersburgo.

Pero después del descanso Bernard ingresó por el mediocampista del Chelsea, y pareció sacudir el ataque brasileño. Muy temprano generó peligro al correr un balón largo para meter un centro templado que la zaga mexicana envió con apuros a tiro de esquina.

Tras esa jugada, el Tri tuvo momentos de brillo, pareció más determinado a llevar peligro al arco brasileño con sucesivos remates de media distancia de Andrés Guardado, Layún, José Gallito Vázquez y Herrera que pasaron muy cerca de los postes.

Aguilar se ganó la tarjeta amarilla a los 58 minutos por una falta sobre Bernard, y poco después Vázquez también fue amonestado por la enésima infracción de los mexicanos sobre Neymar. El remate con curva del astro del Barcelona pasó junto al poste derecho de Ochoa.

A 10 minutos del final, Jo, quien había relevado a Fred, cruzó demasiado un disparo desde un ángulo difícil cuando ingresó solo al área tras pase de Bernard.

Luego, Marcelo tuvo una jugada dentro del área. Raúl Jiménez lo iba marcando y el brasileño cayó al césped, pero el árbitro turco Cuneyt Cakir dejó seguir las acciones.

Poco antes del pitazo final, Guardado aplicó una media vuelta cuyo envío pasó ligeramente encima del ángulo superior izquierdo. El colofón fue un trallazo de Jiménez desde la derecha que desvió el arquero Julio Cesar.

En los mundiales estos equipos se habían enfrentado tres veces, con saldo negativo para México: 11 goles recibidos por ninguno anotado. El Tri sigue sin marcarle tantos, pero este empate le da su primer punto frente a la verdeamarela.