- Séptimo refugio blanco de bombardeos
The Independent
Periódico La Jornada
Lunes 4 de agosto de 2014
Rafá, 3 de agosto.
El ataque israelí contra otra escuela de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en Gaza en que murieron diez personas este domingo fue un atropello moral y un acto criminal, aseveró el secretario general del organismo mundial, Ban Ki-moon, quien pidió que quienes resulten responsables de esta desmedida violación de las leyes internacionales enfrenten consecuencias.
Es la séptima vez que un refugio de la ONU sufre un ataque en los 27 días de conflicto en Gaza. Todas las víctimas se refugiaban en dichas escuelas después de que el ejército israelí les ordenó salir de sus casas.
Las muertes más recientes tuvieron lugar en Rafá, que ha sufrido feroces ofensivas después de que Israel acusó a Hamas de secuestrar a un soldado y matar a otros dos en una emboscada. Este domingo murieron en total unos 118 palestinos, según el Ministerio de Salud de Gaza, lo que eleva el saldo mortal palestino a más de mil 800 desde que comenzó la ofensiva.
La noche del sábado el ejército israelí confirmó la muerte, durante una operación militar, del teniente Hadar Goldin, pero eso no hizo que los ataques disminuyeran y la explosión que hubo esta mañana a la entrada de la Preparatoria A en Rafá ocurrió mientras niños y niñas se reunían en torno a un puesto de dulces y frituras.
De los diez muertos, cuatro eran niños de entre cinco y 12 años. Sus cuerpos envueltos en mantas fueron tendidos sobre el pavimento antes de ser trasladados al hospital local. También había adultos reunidos en la fila para comprar golosinas cuando ocurrió la explosión.
El misil dejó una hendidura poco profunda al caer al suelo y lanzar metralla por doquier.
Estas muertes coinciden con el retiro de algunas fuerzas israelíes de varias regiones al norte de Gaza, donde se dijo a los habitantes que podían volver a sus hogares.
Sin embargo, algunas de las personas que regresaban se encontraron bajo fuego; entre ellos la familia Sobah, de la que cuatro miembros resultaron heridos por un ataque con drones minutos después de haber llegado a Beit Lahiya.
Los ataques contra escuelas han provocado amargas recriminaciones internacionales que incluyen al secretario general de la ONU y críticas de gobiernos extranjeros contra el ejército israelí. El bombardeo contra el refugio de Jabaliya, en el norte de Gaza, mató a 19 personas y fue condenado por Ban como un acto injustificable y vergonzoso, además de provocar una severa e inusual reprimenda de la administración del presidente estadunidense Barack Obama.
Los mandos castrenses israelíes han sido informados no menos de 17 veces sobre la ubicación de la escuela en Jabaliya, reveló la ONU. Un ataque la semana previa en Beit Lahiya en la que 16 personas murieron llevó a que Tel Aviv acusara a la ONU de haber ignorado su advertencia de evacuar el plantel, a lo que Naciones Unidas respondió que Israel mentía, pues el organismo nunca recibió tales advertencias.
Tras el ataque en Rafá, el director de operaciones de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados en Gaza, Robert Turner, reiteró que no hay excusas para no saber que una escuela está siendo usada como refugio. La localización de estas instalaciones se ha comunicado al ejército israelí en múltiples ocasiones, afirmó. Ellos saben dónde están estos albergues y no tengo idea de por qué sigue pasando esto. No tengo palabras para explicarlo. No lo comprendo, agregó Turner.
Casi todas las acciones militares israelíes se han llevado a cabo alrededor del este de Rafá, donde ha habido consistentes tiroteos nocturnos cerca de la escuela atacada hoy, y que está ubicada en el céntrico distrito de Nijma.
Salah Malal, de 24 años, estaba usando la lavandería ubicada cerca de la reja principal de la escuela para luego ir al funeral de un amigo, muerto por el fuego de tanques el día anterior, cuando la onda expansiva de la explosión lo arrojó al suelo. Escuché un silbido y después un estruendo. Después sentí dolor en las piernas.
Añadió: Había muchos niños llenos de sangre, traté de llegar hasta ellos para ayudar, pero no podía sostenerme en pie.
Mohammed Nazmi Olwan, de 15 años, ya había sido herido en las piernas cuando su hogar fue bombardeado hace 20 días. Después de eso, mi padre decidió que nos refugiaramos en la escuela, declaró en el Hospital Kuwaití de Rafah. Desde luego ya habíamos escuchado sobre las otras escuelas que estaban atacando, pero no teníamos otro lugar donde ir. No creí que me hirieran de nuevo. No pensé que tendría tan mala suerte.
Mohammed yacía en una camilla en el corredor del sanatorio mientras enfermeras le suturaban heridas en abdomen y muslos. El hospital Al Najjar, el principal de la ciudad, fue gravemente dañado por fuego de artillería y este es el más pequeño de los tres hospitales a los que fueron enviados los heridos de hoy.
Unos 58 cadáveres tuvieron que ser abandonados cuando se evacuó Al Najjar. Hoy los recibió el Hospital Kuwaití. Fueron amortajados y atiborrados en un cuarto. Algunos de los conductores de las ambulancias dijeron que fueron blanco de disparos cuando circulaban por las calles.
El doctor Mohammed Hams, quien llegó al Hospital Kuwaití de Al Najjar señaló: tuvimos que recuperar los cuerpos. Se hubieran descompuesto si los dejábamos ahí en el calor. Como puede ver, aquí hay familias que quieren sepultar a sus muertos. Algunos, sin embargo, tienen lesiones muy graves y será difícil que los identifiquen.
El médico dijo también que el Hospital Kuwaití es privado y tiene sólo diez camas. Una casa cercana al sanatorio, donde vivía la familia Taha, fue blanco de bombardeos el sábado y cuatro de sus miembros murieron, incluido un bebé de dos meses.
Esta tarde hubo otro bombardeo aún más cerca del Hospital Kuwaití. La situación se torna cada vez más peligrosa. Quizá tengamos que evacuar y eso significa que no habrá ninguna ayuda médica para la gente de esta zona, dijo el doctor Hams.
El número de muertos en Gaza se ha convertido en un tema político en Gran Bretaña. Ed Miliband, el líder de los laboristas, acusó al primer ministro, David Cameron, de guardar silencio para no irritar a potenciales críticos dentro de su propio partido conservador. Un silencio que está matando a cientos de civlles palestinos, acusó Miliband
Dejar una contestacion