“La familia es la primera escuela de valores donde se basa la estructura de una educación para la paz. En el cumplimiento del deber educacional los padres no pueden ser sustituidos y nadie puede quitarles esta tarea primordial”, dijo la coordinadora estatal del programa en Salud mental, Erika Ruiz Santiago.
Y es que debido a los numerosos casos de Bullying (persecución y agresiones) que se están detectando en las escuelas, y que están llevando a niños y adolescentes a vivir situaciones aterradoras, destacó la importancia de poner especial atención en cambios de actitud en los hijos.
Explicó que el bullying se refiere a todas las formas de actitudes agresivas, intencionadas y repetidas que ocurren sin motivación evidente, adoptadas por uno o más estudiantes contra otro u otros, presentándose en casi cualquier contexto, sin diferencia de sexo en lo que respecta a las víctimas, en tanto que en el perfil del agresor sí se aprecia predominancia de los varones.
Por ello explicó que un clima familiar desorganizado, autoritario, violento, sin normas o permisivo y dependiente puede enseñar al niño o niña a comportarse agresivamente para conseguir sus objetivos, por lo que reiteró que la comunicación con los niños y adolescentes es fundamental para un desarrollo y crecimiento armónico.
Agregó que también existen factores que provienen directamente del centro escolar como: la falta de coordinación, supervisión, compromiso y colaboración entre los profesores, inconsistencia en la prevención de conductas agresivas o la permisividad o el fomento por parte de los directivos, así como la convivencia de varias culturas-etnias dando lugar a actos racistas.
El Bullying, dijo, ocurre preferentemente cuando los profesores, padres y adultos no están presentes: en el recreo, el cambio de hora, a la salida del colegio, en los baños y en los chats o blogs.
Ante este panorama, la psicóloga de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) aseguró que la creación de las estrategias más eficaces son las integrales, aquellas que incorporan a toda la comunidad escolar y operan en los distintos niveles, “la integración de los padres es fundamental, por lo que es considerada en la mayoría de las actividades en el combate a esta problemática”, finalizó.
CARACTERISTICAS DEL AGRESOR:
• Tienen una situación social negativa aunque cuentan con algunos amigos (seguidores-espectadores) que simpatizan en su conductiva violenta.
• Una tendencia a abusar de su fuerza.
• Son impulsivos, con escasas habilidades sociales, con baja tolerancia a la frustración y con dificultad para cumplir normas.
• Tienen dificultad para colocarse en el lugar de los demás (falta de empatía).
• Están menos satisfechos que sus compañeros con su aprendizaje escolar y con las relaciones que establecen con los profesores.
• Son considerados por sus compañeros como intolerantes y arrogantes pero al mismo tiempo se sienten fracasados.
• Se integran con individuos que no han tenido muchas oportunidades de protagonismo positivo en el sistema escolar.
• Su frecuencia es mayor en su adolescencia temprana, en la que se experimenta una mayor dependencia del grupo de compañeros.
Dejar una contestacion