Arturo Cano – Enviado
Periódico La Jornada
Domingo 26 de octubre de 2014, p. 7
La propuesta “ciudadana” de Ayotzinapa para remplazar a Ángel Aguirre Rivero tiene nombre: Rogelio Ortega Martínez, secretario general de la Universidad Autónoma de Guerrero. Una solución a la michoacana. Si en el vecino estado nombraron a Salomón Jara, en Guerrero nombran a un perredista con sólido perfil acádemico que, además, tiene entre sus credenciales haber sido subsecretario de Educación con Zeferino Torreblanc0a, época en la que entabló una fluida relación con la Normal Rural de Ayotzinapa.
Tres veces candidato a la rectoría, Ortega Martínez formó parte del grupo del asesinado aspirante a la gubernatura Armando Chavarría y, antes, de la segunda versión de la Asociación Cívica Nacional Revolucionaria (ACNR).
Doctor en ciencias políticas y sociología, sobresaliente cum laude por la Universidad Complutense de Madrid, sus méritos fueron suficientes para atajar el paso a la candidata propuesta por la corriente Nueva Izquierda del PRD, Beatriz Mojica.
Apenas el pasado martes, Ortega Martínez acompañó al rector Javier Saldaña a una visita a la normal de Ayotzinapa.
Antes de tomar la palabra, el rector Javier Saldaña se la cedió al secretario general y, desde este domingo, gobernador interino.
Ortega habló de la ayuda que la universidad había llevado ese día: “Que sirva para que no se desanimen, para que no pierdan la fe. Para decirles que no están solos, que esta gran universidad va a acompañarlos hasta las últimas consecuencias”.
Ahora, dado que será nombrado por el Congreso guerrerense en una sesión matutina, podrá llevar a la práctica sus dichos.
Siguió Ortega: “Sentimos en carne propia su dolor. Nosotros hemos tenido el infortunio de tener universitarios desaparecidos”.
Foto
Rogelio Ortega Martínez, secretario general de la Universidad Autónoma de Guerrero, será nombrado este domingo por el Congreso local como gobernador interino, en sustitución de Ángel Aguirre RiveroFoto tomada de la página de Facebook de Ortega Martínez
Habló también del pasado de represión en Guerrero: “Cuando hubo jóvenes secuestrados y nos movilizamos con prontitud, les salvamos la vida y los recuperamos. A diferencia de cuando nadie hizo nada, por temor, por el terror que en aquel tiempo existía, y tenemos una larga lista de desaparecidos”.
Mientras el rector vestía un chaleco de plástico, Ortega Martínez iba formal, aunque de saco, y quiso alentar a los familiares de los desaparecidos: “Ahora ustedes tienen una gran fortuna, que espero que les dé consuelo, tienen una gran solidaridad, no solamente de Guerrero, de México entero e incluso internacional”.
Hizo después una referencia al valor de la escuela de Ayotzinapa, porque “La educación iguala socialmente”. Y concluyó: “¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos. ¡Y ya!”
Antes de él, habían hablado los dirigentes de los sindicatos universitarios, pero Ortega Martínez fue el primero en recibir aplausos.
Para designar al nuevo gobernador se requieren 31 votos. El PRD y su aliado el Movimiento Ciudadano suman 25. Requieren, en consecuencia, los tres votos del PAN, y los de Panal y PT, que cuentan con un diputado cada uno. Aun así, la designación de Ortega Martínez requeriría por lo menos un voto del PRI o el Verde. O bien una instrucción desde Bucareli.
Con la designación de Ortega Martínez se cumpliría la condición de los adversarios de Nueva Izquierda del PRD, que no querían ver en la gubernatura a Beatriz Mojica, la secretaria de Desarrollo Social de Ángel Aguirre. “No se trataba de premiar a los culpables de este desastre”, como dijo un perredista local.
Publicación original: http://www.jornada.unam.mx/2014/10/26/politica/007n1pol
Dejar una contestacion