1. El PRD condena la violencia como forma de acción política. La destrucción de material electoral destruye la democracia. Los afectados por la acción de algunos grupos radicales no son los partidos, sino los derechos de los ciudadanos para elegir a quienes los representen como diputados, o en su caso, para elegir a sus gobernantes.
Con independencia de los problemas de fondo que existen en materia educativa, no hay congruencia democrática si un grupo decide que puede anular el derecho de un sector de los ciudadanos oaxaqueños.
Por tanto, condenamos los ataques de algunos grupos radicales a las casillas y las sedes en los distritos federales, que propiciaron la suspensión temporal o definitiva de las votaciones. No es ninguna victoria democrática dejar a algunas personas sin ejercer un derecho, ni tiene nada de positivo alejar a los ciudadanos de la toma de decisiones.
Aun cuando formalmente la mayoría de las casillas correspondientes a nuestro Estado pudieron instalarse y operar, el PRD sostiene que el ataque a una sola casilla es un atentado contra la libertad de los ciudadanos y además tiene el efecto de reducir el número de votantes.
Valoraremos con nuestra dirigencia nacional y en consulta con los compañeros del partido en los distritos, las acciones específicas a desarrollar, sin descartar ninguna alternativa.
2. El PRD observa con preocupación que el gobierno federal no actuó con oportunidad y eficiencia. El factor principal es que no supo resolver ni procesar el problema de fondo por medio del diálogo.
Tampoco tuvo éxito para garantizar de forma amplia, el ejercicio del voto ciudadano.
3. El PRD actuará de manera responsable en este proceso electoral. Hemos hecho una campaña propositiva y esperaremos a que se presenten sus resultados para emitir una valoración.
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