Jaime GUERRERO
OAXACA, (pagina3.mx).- El escándalo del diputado federal del Partido de la Revolución Democrática (PRD) Hugo Jarquín es un asunto de la vida privada que trascendió en lo público, pero eso no refleja la conducta de la dirigencia estatal. “Es un asunto que Hugo Jarquín tiene que aclarar”, puntualizó el líder estatal del Sol Azteca.
Carol Antonio Altamirano dijo que más que un llamado, “el PRD y sus actores están obligados a actuar bien, y los que tenemos una responsabilidad, a desempeñar el cargo bien y no estar metiéndonos en problemas”.
De acuerdo con los estatutos del PRD, el órgano que tendría que tomar una decisión al respecto es el órgano jurisdiccional y con base en un procedimiento puede determinarse una sanción o no.
El dirigente estatal del PRD aclaró que como Comité Estatal no tienen la facultad de expulsar a nadie. “Lo que yo pudo hacer es, quizás, una llamada de atención pública, pero es el órgano jurisdiccional es el que debe sancionar y los mismos estatutos lo determinarán”, puntualizó.
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