Ernesto Rojas Ayuzo / Juchitán / Oaxaca
En Juchitán de Zaragoza tras el asesinato de Oscar Cazorla, bajo la anuencia del vicefiscal Alejandro Matus, personal de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) detuvo a tres menores de edad, a quienes pretendieron involucrar en el homicidio del líder de la comunidad Muxe, sin embargo, tras varios días de tortura uno de ellos falleció.
Se trata de los hermanos Geovani y Osmar de apellidos R.G e Iván L.F, quienes fueron trasladados a las instalaciones de Delitos de Alto Impacto de la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) en donde fueron torturados durante varios días, con la finalidad de declararse culpables del homicidio de Oscar Cazorla.
Al momento de la detención de los tres jóvenes, el personal de la FGEO no presentó ninguna orden de aprehensión o documentos que avalen la privación de la libertad de los mismos, por lo que ahora se presume se realizó de manera ilegal.
Los jóvenes se desempeñaban como ayudantes de albañilería en un predio ubicado a un costado de la casa de Oscar Cazorla.
Familiares de los tres jóvenes detenidos y torturados, exigen justicia y que se esclarezca el motivo que originó el fallecimiento de uno de ellos a manos de personal de la FGEO.
Allegados de Oscar Cazorla han manifestado que durante las diligencias realizadas en el lugar del homicidio por personal de la FGEO, se perdió dinero en efectivo y joyas del extinto.
El activista Oscar Cazorla fue hallado sin vida en medio de un charco de sangre a interior de su domicilio el día 10 de febrero, durante las diligencias se determinó que recibió al menos 20 puñaladas en distintas partes del cuerpo.
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