Por Armando G. Tejeda / LA JORNADA
Madrid. La constructora española OHL informó hoy a través de un comunicado que ha sido víctima de un “espionaje telefónico” y que, tal y como advirtieron ayer sus ejecutivos, tanto en México como en Madrid, las supuestas corruptelas en las estarían involucrados son “radicalmente falsas”.
La compañía presidida por Juan Miguel Villar Mir penetró en México hace varios lustros, si bien en los últimos años, a raíz de la crisis económica que sufre España, provocada sobre todo por la burbuja inmobiliaria, se ha centrado más en sus inversiones foráneas, sobre todo en México.
La cotización bursátil de la empresa española sufrió ayer un severo varapalo tras la filtración de unas grabaciones telefónicas en las que se probó el trato de favor que ha recibido esta compañía por autoridades mexicanas, en concreto por el secretario de Comunicaciones del Estado de México, Apolinar Mena, quien además fue invitado con los gastos pagados a un resort de lujo en la Rivera de Maya, también propiedad de OHL. Hoy, tras la caída de sus acciones de un 9.1 por ciento, la cotización empezó con un ligero repunte del 1.5 por ciento.
Ante las evidencias y las publicaciones de las grabaciones, los principales directivos de OHL en México se mantienen en sus puestos y ayer, para atajar la crisis, mantuvieron una “reunión con analistas financieros” para explicarles el caso y la supuesta pulcritud del polémico contrato que les adjudicó el contrato del Viaducto Bicentenario.
En un comunicado, también remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) como un “hecho relevante”, la compañía advierte que “ha tomado la decisión de ordenar a una de las grandes firmas auditoras de prestigio mundial la realización de un informe sobre la actuación de OHL México en el desarrollo del contrato de concesión del Viaducto Bicentenario, así como aportar conocimiento y seguridad a cuantas instituciones se relacionan con su filial mexicana”. Además de una supuesta “investigación interna” que se habría iniciado ayer mismo.
“OHL ha tomado esta decisión con la absoluta seguridad de que tanto OHL México como sus filiales se han venido ajustando, en todos los casos, a la más estricta legalidad, respetando escrupulosamente sus contratos, sin que hayan existido malas prácticas en su gestión ni irregularidades en sus relaciones con las administraciones públicas mexicanas, tanto estatales como federales”, señalan.
Y, pese a las evidencias de las supuestas corruptelas de sus directivos, se dicen “víctimas”: “Ayer se puso de manifiesto en una larga sesión informativa de la alta dirección de OHL México con analistas financieros, las imputaciones de irregularidades en la gestión de OHL México son radicalmente falsas, y las cifras manejadas, producto de una invención que en nada se ajusta a la realidad de los casos referidos en el espionaje telefónico de que ha sido objeto la compañía, y sobre el que está previsto adoptar las acciones legales pertinentes”.
Dejar una contestacion