Oscar Rodríguez
El gobernador de Oaxaca, Gabino Cué, aseguró que no habrá negociación política para liberar a los cuatro líderes de la CNTE que fueron detenidos ayer.
«Hemos sido muy claros, la ley no se negocia, al contrario, tenemos que ir por una ruta de aplicación de las normas en Oaxaca como en algunos otros lugares. Hoy ya no se puede negociar, lo que tenemos que hacer es dialogar y cumplir la norma para que no haya este tipo de detenciones», afirmó.
En entrevista, Cué dijo que pese a las detenciones, su gobierno está dispuesto a dialogar con la Sección 22 de la CNTE.
«Siempre ha habido diálogo con la CNTE, ha sido nuestra posición. Queremos sentarnos a dialogar, pero siempre y cuando este diálogo sea abierto, sea con puntos muy claros de los temas que ellos quieran abordar, siempre y cuando sean a favor de la niñez».
El gobernador de Oaxaca explicó que en los últimos meses, los cuatro maestros detenidos participaron activamente en actos constitutivos de delitos, según consta en imágenes y denuncias, por lo que se logró integrar la averiguación
Dijo que «no se trata de detener por detener», y aseguró que «los maestros y maestras tienen el derecho a manifestarse, pero nunca generar daños a terceros, ni disturbios, porque eso es constitutivo de delitos».
En tanto la asamblea estatal de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) fue convocada de manera extraordinaria para discutir el plan de acción a seguir para lograr desde la liberación de los 4 docentes detenidos hasta diseñar una ruta de defensa legal para evitar la captura de sus lideres.
Rubén Núñez afirmó que se esta buscando el apoyo de los organizaciones de derechos humanos, a nivel internacional, adelantó que se ha buscado un acercamiento con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para denunciar la represión de estado, persecución política y criminalización de la protesta social que esta cometido la federación y el gobierno de Cué para intimidarlos y desarticularlos.
Cuestionó que se haga uso de la fuerza de estado, el ejercito, la policía federal y los juzgados para exterminarlos, cuando conforman el movimiento sindical mas grande de los últimos 30 años en Latinoamérica.
En el plan de acción a construir se encuentra desde valer una estrategia jurídica con amparos masivos y el lanzamiento de una S.O.S a los sindicatos y fuerzas progresistas en el país para que se sumen a una defensa legal y de movilización de la CNTE, a la par de iniciar una ofensiva de movilizaciones, con un menú amplio que incluye marchas, toma de carreteras, autopistas, aeropuertos, negocios y suspensiones parciales del ciclo escolar.
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