Moisés, una exitosa gestión más de “Una Mano Amiga”

 

 

  • Gracias a la gestión que realizó, Samy Gurrión, el niño Moisés Carbajal fue atendido por su problema de epilepsia
  • La joven madre, Alma Rosa, dice que durante años sufrió por el padecimiento de su hijo y porque los políticos se burlaron de su dolor “prometieron ayudarme y nunca cumplieron”

Oaxaca de Juárez.- Este sufrimiento no tiene comparación, nada es más terrible que ver como tu hijo, la luz de tus ojos, pareciera que se desbarata en el suelo, inconsciente, torciéndose como si no fuera él, así es como describe, Alma Rosa Carbajal Ramírez, los momentos difíciles que ha pasado con su hijo, Moisés Isaac, quien padece Epilepsia desde los tres años.HUAJUAPAN (4)

 

Ese día nunca lo podré olvidar, fue el momento en que mi vida y la de mi familia dieron un giro violento que nos llevaría a sufrir y además a ser engañados y burlados por casi tres años consecutivos por políticos que supuestamente eran nuestros amigos, hasta que conocí al gestor social, Samuel Gurrión Matías.

 

Dios lo puso en mi camino, dijo la joven madre de 38 años, Almita, quien es originaria de Huajuapan de León en la región de la Mixteca.

?
?

Todo comenzó un día de octubre de 2011

 

Relató que un día de octubre hace cuatro años, Moisés Isaac, jugaba afuera de su casa, perseguía una pelota que con el aire iba y venía de un lado al otro lado de la banqueta. De repente, un camión repartidor de Gas LP dio vuelta en la esquina, iba rápido, no se fijó y lanzó al niño por los aires, su cuerpecito de apenas tres años quedó tendido en el piso.

 

Con los labios temblorosos, Almita, contó que rápidamente levantó a Moy y se lo llevó al doctor, quien unos días después descartó alguna lesión severa “todo había quedado en raspones y moretones, nada grave”.

?
?

Siete meses después nuevamente mi hogar se tiñó de tristeza, mi pequeño hijo quien acababa de cumplir cuatro años tuvo su primer epilepsia y de ahí se repitieron hasta que se volvieron permanentes. En un día llegaba a presentar cinco ataques continuos, se estaba muriendo.

 

En este momento inició la travesía difícil de Alma Rosa, pues sus escasos recursos económicos le impedían llevar con un especialista a su hijo y además comprarle el medicamento necesario “en varias ocasiones llevé a mi hijo al hospital de Huajuapan y me negaban el servicio porque supuestamente no era grave”.

 

Almita, desesperada por lo que sucedía con Moisés abandonó su trabajo como empleada doméstica para vigilarlo las 24 horas y conseguir ayuda, ya que en cada convulsión perdía la memoria.TLAXIACO (3)

 

Refirió que al ver que nada mejoraba con su hijo solicitó el apoyo de varios políticos de su región sin obtener respuesta alguna “éramos invisibles, únicamente en campaña nos buscan y esta vez no era campaña”.

 

En la Mixteca, Alma Rosa, vendía ya sus pertenencias para viajar a Oaxaca de Juárez y seguir buscando ayuda, su dolor era inmenso y su desesperación el motor que la impulsó a seguir luchando cada día durante cuatro años con tal de salvar a su hijo.

 

“Nunca pasó por mi mente vencerme y dejar morir a mi hijo, era necesario y urgente que llevara un tratamiento adecuado pero no teníamos el recurso, las cosas se pusieron peores, los ataques de Moisés eran cada semana, a veces cada dos días, temíamos que muriera de un golpe al caer”, narró, Alma, mientras rodaban por su mejilla unas lágrimas.

 

Una vecina de Alma, le comentó que a Huajuapan llegaría un gran político, que nunca le ha fallado a la gente, y aunque no le creyó sus ganas de seguir luchando la llevó a conocer al gestor social, Samuel Gurrión Matías.

 

“Fui a verlo y me sorprendió que pude hablar con él, nadie me dijo que no me acercara o que después me responderían. Inmediatamente tomaron mi número y una copia del expediente de mi hijo y se lo llevó, la gente se arremolinaba alrededor de Samy, poco pude hablar con él”.

 

Tres días después recibí una llamada, me quedé sorprendida y mil veces agradecida con Dios porque era el personal de la Asociación Civil “Una Mano Amiga”, quien por gestión de Samy Gurrión le daría el seguimiento a mi caso.

 

Almita asegura que su pequeño ahora de casi 9 años va mejorando día con día, ya aumentó de peso, platica más y en general su calidad de vida mejoró gracias a la atención que actualmente recibe en el  Hospital de la Niñez, donde también por gestión del ex diputado federal recibe el tratamiento y la rehabilitación necesaria.

 

“Sin la ayuda del gestor social no sé qué hubiera pasado, ahora digo que la gente buena está en algún lugar. Gracias Samy”.

 

Cabe destacar que la Asociación Civil, “Una Mano Amiga” ha ayudado a más de un millón de personas en el estado, con sus jornadas ciudadanas itinerantes, donde ofrece servicios médicos con medicinas y todo gratuito.

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*