Evidencian corrupción y falta de mantenimiento de las lanchas en la API de Salina Cruz.

Agustín López Santiago.

Salina Cruz, Oax. Luego del hundimiento de dos lanchas en el muelle de la Administración Portuaria Integral (API) y accidentes aislados que se han presentado, las autoridades hasta el momento se muestran herméticos en torno a los hechos que ocurren al interior de ese reciento portuaria.

Y es que las lanchas “gaviota” y “Marlín” de avituallamiento y transporte que son propiedad de la empresa “Servicios de Lanchas de Salina Cruz”, se hundieron justamente cuando se encontraban amarrados en la dársena de la Administración Portuaria Integral (API).

Asimismo, no se dio a conocer del porqué las causas del hundimiento, en la que había una especulación que fue por la falta de mantenimiento asociado por los fuertes vientos y oleaje.

Al respecto, el presidente de la agrupación “Unidos por el Desarrollo de Salina Cruz”, Rafael Ramírez expresó que es preocupante la situación que se vive en el recinto portuario de API, que con la llegada de los nuevos directivos de alto nivel y referente al director de esa dependencia federal, Ángel Pérez Cantú ha sido sumamente comentada debido a su falta de tacto y falta de política al frente de la empresa.

Reconoció que Pérez Cantú proviene de la iniciativa privada nunca ha estado relacionado con la industria marítima, es incapaz de distinguir entre un buque mercante y un buque de guerra, mucho menos pudiera tener el conocimiento de términos generales para la conducción de un puerto.

Su bien, aseguró que este funcionario ha sido evidenciado de protagonizar escándalos en varios antros del puerto y donde asegura que no le pueden hacer nada porque goza del respaldo del Subgerente de Finanzas Miguel A. Landeros y por sobre todo goza de la protección de Francisco Rene Chapa, del Órgano Interno de Control, personajes que le acompañan a donde quiera que vaya.

La falta de visión de Ángel Pérez Cantú, no le permite darse cuenta del barril de pólvora donde está sentado, se avecinan una serie de enfrentamientos entre grupos de transportistas antagónicos, que podrían llegar incluso a enfrentamientos armados.

Pidió a las instancias de gobierno atender este problema que puede salirse de control, provocado por una persona que poco o nada le interesa atender los asuntos internos en el recinto portuario.