Oscar Rodríguez
Onésimo Bravo Hernández, presidente en Oaxaca de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) precisó que el pacto que firmó el Gobierno del Estado, el Congreso local y la CNTE para “armonizar” la reforma educativa en la entidad, no es más que un capricho cumplido a base de chantajes al gremio magisterial.
“Es sorprendente que a pesar de la mala gestión y el mal trabajo que han desempeñado los maestros a lo largo de treinta años, el gobierno los siga consintiendo”, mencionó el también empresario.
Respecto a las manifestaciones que a partir de este martes inició la CNTE para evitar que el Congreso local armonice la reforma educativa, el presidente de la Canirac en Oaxaca, dijo que sin duda las movilizaciones seguirán afectando el ingreso económico, no solo para los pequeños y grandes negocios, sino también para las familias y para el estado en general, sin embargo eso no ha sido motivo para que el Gobierno actúe con mano dura para frenar ese tipo de acciones.
El empresario criticó que la educación haya quedado muy por debajo de los objetivos reales de los maestros.
“Ya no es el beneficio de un sindicato, esta problemática tiene tintes personales”, subrayó.
Este martes la Sección 22 de la CNTE inició sus movilizaciones con el acordonamiento del Congreso local por un lapso de 48 horas, posteriormente iniciarán bloqueos carreteros en el interior del estado, las clases fueron suspendidas para el nivel medio superior.
El representante de la Canirac señaló que es necesario que los padres de familia expresen las voces de descontento respecto a la serie de mecanismos de lucha que han radicalizado los mentores en los últimos años.
«Ya no es justificable que sigamos permitiendo que la Sección 22 mantenga a Oaxaca sitiado y bajo la incertidumbre», expresó.
Cabe señalar que tan solo en el 2013 a causa de los bloqueos y marchas de la Sección 22 cerca de 60 negocios pequeños y grandes tuvieron que cerrar sus puertas ante las bajas ventas.
El presidente de la Canirac dijo que espera que con la llegada de la reforma educativa el Gobierno Federal meta mano dura para enderezar el camino que los maestros han tomado.
«Ya estamos cansados y creo que ya es justo que se haga algo al respecto», concluyó.
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