Por Jaime Whaley
México, DF. La selección de México aprovechó bien la oferta que le brindó su similar de Israel y se despidió de la afición, con vistas a su participación en el Mundial de Brasil, con un triunfo.
La victoria tricolor no fue tan cara para el cuadro visitante, un rival a modo, pero con dos goles de Miguel Layún y otro de Marco Fabián saldó el compromiso.
Las anotaciones de Layún fueron con cooperación del arquero israelí Ariel Jaruch, quién a los 42 minutos intentó despejar de puños un disparo inocuo y desvió el balón hacia las redes.
A los 61 minutos, por disparo de Layún, Jaruch se tendió hacia un lado, logró tocar el balón con la mano, pero para su infortunio el esférico salió hacia arriba y aterrizó dentro del marco.
En las postrimerías del partido, celebrado en el estadio Azteca que no registró un lleno, Marco Fabián disparó desde media distancia fuera del alcance de Jaruch, que se vio estorbado por el Chicharito Hernández. El reclamo visitante, exigiendo la anulación por un claro fuera de lugar de Hernández, fue infructuoso.
Este ha sido un partido flojo, en el que la escuadra mexicana se mostró desorganizada y carente de recursos, ante un equipo israelí bastante limitado.
El partido también sirvió para darle a Cuauhtémoc Blanco una oportuniodad de jugar, quizá por última vez con la selección, y el polémico jugador demostró su clase a los largo de 38 minutos.
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