Oscar Rodríguez
La Procuraduría General de Justicia de Oaxaca (PGJO) emitió una alerta amber e integroó un legajo de investigación por la desaparición de un niño de origen hondureño en la zona del Istmo de Tehuantepec.
El procurador de Justicia Joaquín Carrillo, rechazó que el caso del menor hondureño Gerson Omar Morales Chávez este vinculado el crimen organizado.
Afirmó que no hay antecedentes de que se trato de un secuestro, y dijo que se ha citado a declarar al tío del menor Mario Augusto Chávez para que explique lo que ocurrió cuando perdió de vista a su hijo.
“Tenemos entendido que arribaron a territorio nacional en calidad de indocumentados, y viajaban junto a grupo de migrantes, que fueron sujeto de un asalto cerca de la zona de vías donde cruza el ferrocarril “La Bestia”, en inmediaciones del municipio de Santa María Chahuites que se ubica en la zona del Istmo de Tehuantepec.
Al parecer después del incidente, el menor avanzo con uno de los grupos y el padre quedo solo, por lo que demando la intervención de las autoridades estatales para hallarlo”.
Sin embargo el procurador, aceptó que el tío ha incurrido en varias contradicciones, ya que ha dado nombres diferentes de la madre del niño identificándola primero como Dilsa González y después como Sijan Chávez, por lo que se teme que la integridad del niño hondureño esté en peligro.
Según Mario Chávez, su sobrino es originario del barrio Bonitillo, en La Ceiba, Atlántida; pero hasta el momento las autoridades judiciales no han contactado a parientes cercanos que residan en Honduras.
El tío de Gerson estaba refugiado en un albergue de Migrantes, y al ver que las autoridades locales y la policía continuaban con las investigaciones, abandonó el lugar.
El pasado 4 de diciembre, agentes de la Procuraduría de Oaxaca hicieron un recorrido por el lugar donde fue raptado Gerson, en el que una familia local aseguró haber visto al menor; sin embargo, aún no ha llegado a ningún albergue, por lo que su futuro es incierto.
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